Desayuno con diamantes
Hay películas que gustan porque son buenas. Porque tienen un fantástico director, o un gran guión, o una fotografía perfecta. Otras gustan por su reparto, o porque tocan tu fibra sensible, o porque te recuerdan algo, te retraen a un momento de tu vida importante o te devuelven a alguien con quien la viste.
Esas son películas que uno puede explicar por qué le gustan. Puedes incluso entablar una interesante conversación sobre algún aspecto de la misma, o descubrir detalles que no habías descubierto.
Pero hay películas que no sabes explicar. La historia de "Desayuno con diamantes" no me siento capaz de clasificarla como uno de los mejores guiones de la historio (hay grandes cambios con respecto al original de Truman Capote, que en realidad no es más que un relato, no una novela), hay actores francamente obviables, como Rooney, cuyo personaje no aporta nada a la historia, y no puedo engañarles diciendo que me retrae a algún momento de mi vida anterior. Es de hecho, en ocasiones, un poco sensiblera. Pero lo cierto es que me gusta. Es una de esas películas que puedo ver una y otra vez y me alegran el día.
Por eso quiero compartir esta canción. Y esta vez con comentario, y sin letra. Por variar un poco. Y porque me apetece. Que como dice Pablo, "el blog es mío y me lo follo cuando quiero". ;D
Y si quieren recomendaciones de películas que sí cumplen todos los preceptos que dije antes, ahí van unas cuantas:
- Rebeca
- Luces de ciudad
- Kamchatka
- Ciudad de Dios
- La vida de David Gale
- La flaqueza del bolchevique
Saludos de miércoles con sabor a agujetas y a hilos hilvanados...
2 comentarios:
Dios mío, me encanta esa peli, la volví a ver hace dos semanas y volví a llorar como una tonta, es encantadoramente preciosa y, como bien dices, no sé porqué es una de mis favoritas.
Veo que no soy el único. Me alegra.
Saludos,
Rafa
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